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Usos recientes en el campo de la educación emplean ya sea en tiempo real o de vídeo grabable para la enseñanza. Sin embargo, en el campo de la salud, el reto es que Google Glass no está diseñado como un dispositivo médico. Como resultado, los cirujanos han tenido que asociarse con empresas para superar obstáculos tales como el desarrollo de software que cumple con HIPAA, enfocando la cámara de campo amplio, e incluso adjuntar lupas quirúrgicas.

El atractivo de Google Glass para los médicos se deriva de nuestra creciente dependencia (tanto la bienvenida y el mandato) en datos electrónicos. Nuestra profesión nos obliga a usar nuestras manos para ayudar a la gente, ya sea mediante el examen de los pacientes o la realización de la cirugía. Interacciones de los pacientes no se prestan para que se sienta delante de un ordenador durante horas en un momento en el envío y recepción de datos. Desafortunadamente, este tipo de actividades están absorbiendo más y más de nuestro tiempo, llevándonos "de momento" cuando se trata de cuidado del paciente.